· Un ladrón no se escapa, sino que se da a la fuga, y habitualmente no es un ladrón, sino un malhechor. Y un funcionario a menudo está en el riñón del poder, lo que significa es que es un alto funcionario, o bien, un encumbrado funcionario.
· Siempre que un lugar estaba lleno no cabía un alfiler, el cáncer es una larga y dura enfermedad, cuando no penosa, y el funeral siempre, pero siempre, es el último adiós.
· Con frecuencia alguien sigue las instrucciones al pie de la letra, el tránsito es un caos y China, el gigante asiático.
· Muchas veces una final de fútbol es electrizante, las importaciones sufren trabas y la niebla es densa.
· El error siempre es garrafal y la batalla, campal. Y no hay policías, sino efectivos policiales.
· Cada tanto Aníbal Fernández formula polémicas declaraciones y la bolsa se derrumba o tiene una fuerte suba. Y durante el fin de semana largo, de los muchos que hay en la Argentina, siempre se produce un éxodo turístico.
· Con frecuencia un penal es polémico o dudoso, aunque a veces es un claro penal. Y el ajuste suele ser duro.
· Un imputado casi nunca declara, sino que presta declaración; un piloto, en vez de morirse, pierde la vida; y un enfermo no mejora: experimenta una mejoría.
· El elector no vota, sino que emite el sufragio, y los novios no se casan, sino que contraen matrimonio.
· El ladrón que esperó que saliera la familia para entrar en su casa es el malviviente que aguardó que se retiraran los integrantes de la familia para ingresar a la vivienda.
· Un día de sol es una jornada soleada.
· No hay choques, sino colisiones; las muertes son decesos; la renuncia es una dimisión; y los chicos, criaturas.
· Y nadie insultó, sino que profirió insultos. Preferentemente, toda clase de insultos.
(Un problema de la prensa escrita argentina es que se escribe como no se habla)
7 comentarios:
Genial Juanjo! Tal cual. Peor en mi profesión, de golpe como en cuarto año de la facultad, empezás a hablar como idiota y a usar palabras técnicas todo el tiempo... y encima a ofenderte cuando la gente las usa mal o con su acepción cotidiana. Otra cosa más de por qué no nos entendemos.
Me alegro de que te haya gustado, Andre. A propósito, ¿cuál es tu profesión? Un beso.
y la lluvia es pertinaz :) muy bueno! Daniela
lo del rinion del poder me suena a que filtra para mearnos a todos y a todas!
Vo fijate que el matrimonio es como una enfermedad tipo cólera, que se contrae!
Y las mejorías como las lesiones sufridas, suelen ser leves!
Saludo!
¡Ja! Un abrazo, el_pica. Y otros dos para Anónimo y Lucas.
Juanjo, ahí está plasmado el nivel de idiotez que me inculcaron en la facultad que no dije que hacía. Soy abogada. Y hablamos como imbéciles los cuervos, y lo peor, es que los escritos judiciales tienen un léxico inentendible, incluso muchas veces para la gente que está en el tema.
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