miércoles, 15 de octubre de 2008

Estrofas sublimes

• Quiso la siesta ponerle un niño a su soledad, de trigo y luna y de su mano María va (Antonio Tarragó Ros)

• Me voy pa’ los cerros altos, a llorar a solas lejos, pa’ ver si se apuna el dolor, subo, subo (Rolando Chivo Valladares)

• Ya relincha el nuevo día, caballito de la suerte; es un galope la vida, que lleva justo a la muerte (Raúl Galán)

• Ay, qué camino tan desparejo: la angustia, cerca, y mi niño, lejos (Hermanos Núñez)

1 comentario:

Pedro Noli dijo...

A mí me mata una estrofa re popular y conocida, pero siemple, directa y divina:
"Es muy feliz camdombeando, ¡dichoso es! amigo negro José".

Abrazo, primo.